Ragnarok 81

“El cierre de la Grieta”

Idris

Le escuché aceptar el pacto con el demonio y quise gritarle por milésima vez que no lo hiciera, que no merecía la pena, quise llorar y pegarle un puñetazo, pero no podía, no tenia fuerzas para abrir los ojos, me estaba muriendo, la certeza de ese hecho me golpeo por completo, iba a morirme allí y el miedo se estaba apoderando de mi alma como un cáncer.

Tenia los ojos cerrados, pero pude sentir un resplandor morado que seguramente estuviera inundando la cueva, quería mirar para ver que estaba sucediendo, pero no podía abrir los ojos. El orbe. Estaba segura de que lo que brillaba era nuestro orbe, estaba ayudándome a llegar de nuevo a la superficie ¿le habría activado el demonio?¿no había dicho que esa inmortalidad no era para nosotros? ¿Seria demasiado tarde para salvar a Chistian de su transformación? A medida que iba recobrando las fuerzas noté como la curación comenzaba a ser más dolorosa de lo normal, sentí como mi cuerpo se transformaba, sentí como mis células comenzaban a cambiar, no iba a volver a ser humana nunca mas, los supe con tanta certeza como si me lo hubieran dicho al oído.

Estaba volviéndome inmortal y era realmente doloroso.

Sin demasiados preámbulos el dolor cesó por completo y tuve miedo de abrir los ojos, pero la angustiosa voz de Aislyn me saco por completo de trance.

Estaba en el desierto, Keiran, Xander y Aislyn venían corriendo hacia mi.

• ¿Qué ha pasado? - preguntaban a medida que se acercaban. No tenia ninguna respuesta para ellos, todo mi afán era encontrar a Chistian y miré con ansiedad a mi alrededor, no había nadie más que nosotros cuatro. El miedo me golpeó y recordé cada palabra y cada gesto de lo que había ocurrido en la grieta.
• ¡Chistian! - grité desesperada poniéndome de pie y haciendo caso omiso a los otros tres.
• ¿Dónde está Chistian? - preguntó Keiran. Le miré a los ojos y pudo ver a través de ellos.
• Ha hecho una estupidez... es una locura... ¿Dónde está la grieta? Tengo que ir a buscarlo... - mi diatriba sin sentido dejó a mis compañeros sin preguntas y se miraron entre ellos preocupados. Aislyn me obligó a sentarme sobre la arena y se sentó conmigo mientras me cogía tiernamente la mano.
• Tranquilizate y cuéntanos que ha ocurrido, la grieta se cerró hace más de media hora, ya no hay ningún portal al otro mundo, las plagas y las enfermedades volvieron como miles de mosquitos rojos y regresaron a su mundo. Se ha terminado, lo hemos conseguido.
• ¿A que precio? - pregunté derramando las lagrimas que , sin darme cuenta, había estado reteniendo en mis ojos – Chistian no esta, yo... lo amo – Aislyn me sonrió con ternura.
• Ya era hora que reconocieras tus sentimientos hacia él – dijo secándome las lagrimas con sus pulgares.
• Ha sido demasiado tarde, lo he perdido para siempre – les confesé a todos dejándolos en sock.
• Cuéntanos todo lo que ha ocurrido – instó Xander y Keiran casi al unisono.

Me preparé mentalmente para revivir la pesadilla que me iba a acompañar por el resto de mis días, que gracias al orbe iban a ser demasiados para soportarlo. Les conté paso a paso todo lo que había sucedido.