Aviso importante

Las novelas aquí publicadas son de mi autoría y están registradas en el registro de la propiedad intelectual de España a mi nombre.
Para cualquier duda o aclaración, se puede contactar conmigo al correo: alba.galvez1985@gmail.com

lunes, 14 de julio de 2014

Quimera




Capitulo 2



La reunión con Discorphotor fue todo un éxito, conseguí vender mi idea sobre las nuevas modas y formas de divertirse de los adolescentes y no tan adolescentes, esa noche de jueves pasearía por los barrios que me había dicho Gordon donde supuestos vampiros y demonios tenían sus encuentros fugaces y sus fiestas macabras, mi cámara y yo estábamos preparados.
Ahora solo tenía que enfrentar a mi padre.

Cuando llegue a el Jaleou´s nuestro restaurante preferido allí estaba él, como siempre usando sus pantalones de pana favoritos y su camisa a cuadros.

  • ¿Cómo estas princesa? -preguntó él besándome y estrechándome en sus brazos. Mi padre a diferencia de mi constitución menuda era un hombre de lo más corpulento. Sus manos siempre manchadas de grasa de coche que no saldría de su piel y sus uñas hasta que no decidiera jubilarse, eran símbolos tan característicos como entrañables.
  • Bien, pero hoy tengo cosas de las que necesito hablar papa – le dije. Automáticamente se puso tenso y comenzó a toser fuertemente.
  • Tienes que tomarte algo para ese resfriado o se va a convertir en una pulmonía – le regañé. Era un cabezota y jamas le había visto tomarse ningún medicamento.
  • Se me pasará solo igual que ha venido – contestó como siempre. Me preocupaba que alguna vez pasase algo más grave, pues no estaba muy segura de que pudiéramos obligarlo a tomar medicamentos.
  • Tú sabrás lo que haces – le dije exasperada – necesito hablar contigo – añadí.
  • ¿A ocurrido algo? - preguntó nervioso mientras nos sentábamos en nuestra mesa de siempre.
  • Lo de siempre Jamil – le dije a la camarera que me guiñó un ojo y se fue a pedir nuestra habitual comanda – hoy un hombre me ha dicho que no soy humana... - solté a bocajarro, no sabía muy bien como empezar a decirlo y mi falta de amistades y relaciones me hacían ser algo... bueno digamos que era brutalmente sincera y que no conocía mucho el tacto a la hora de tocar temas sensibles o vergonzosos.
  • ¿Quién ha sido? ¿Cómo ha ocurrido? ¿Cuándo? - dijo nervioso y tiró el vaso de vino que le estaba sirviendo.
  • Tranquilízate papa – le dije fulminándolo con mis ojos violetas. Aquí pasaba algo raro, pero en el fondo de mi corazón, de mis sentimientos, sabía la verdad, yo ya lo sabía pero no lo quería ver, o al menos no lo había querido ver hasta ese momento.
  • Es algo complicado... yo no sé.... tienes que decirme quien te ha dicho eso, hay que acabar con cualquiera que lo sepa – sus palabras me dejaron completamente congelada. ¿acabar con alguien?
  • ¿Estas loco? No digas esas cosas y explícame que demonios ocurre o voy a descubrirlo por mi cuenta – amenacé. Mi corazón estaba latiendo con fuerza, ver aquel hombre que siempre me había dado lo mejor y me había colmado de amor y cariño tan nervioso y a punto de sufrir un ataque al corazón... me partía el mio, pero ya era hora de saber quien era y de donde venia.
  • Tienes razón... soy un mal padre... yo te he puesto en peligro al dejarte estar en la inopia, Mary siempre me lo ha dicho, siempre ha estado en contra de que no supieras tu historia, incluso cuando te secuestraron teniendo veinte años... ese año que estuviste desaparecida... fue el peor de mi vida, tenía que habértelo contado otra vez cuando regresaste, pero no recordabas nada de lo sucedido esos meses y fui dando largas y largas hasta ahora - ¿Mary? ¿Qué demonios tenía que ver la tía Mary con esta historia? Mi año en blanco... nunca había tenido ni un solo recuerdo de ese año que desaparecí de mi casa, fue como si me hubieran dormido y al cabo del año hubiera despertado en el mismo sitio. Mi padre leyó la pregunta sobre Mary en mis ojos y prosiguió – digamos que ella y yo nos conocimos hace mucho tiempo en ciertas circunstancias y Blake es... bueno algo parecido a ti.
  • ¿Qué demonios soy? - pregunté nerviosa.
  • Bueno... tú misma lo has dicho... digamos que eres mitad ángel... y mitad demonio, Norah, cariño eres lo que se llama una Quimera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Te vas sin dejarme un comentario....

Te vigilo....


Mapa de visitas